El consumo de bebidas energéticas ha incrementado en los últimos años. No obstante, hay que tener cuidado con el consumo excesivo de estas bebidas, ya que puede ser peligroso para la salud. En este artículo te explicamos cuáles son los peligros y riesgos de las bebidas energéticas junto a algunas recomendaciones para un consumo responsable.
¿Qué son las bebidas energéticas?
Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), no existe una definición de la palabra “bebida energética”. Sin embargo, podemos definirlas como un refresco que actualmente es muy popular entre los adolescentes y deportistas y que suele combinarse con bebidas alcohólicas. Su composición incluye muchos ingredientes diferentes, entre los que destacan una gran cantidad de azúcar y cafeína.
Además, puede entrar en su composición el aminoácido taurina, junto a otras sustancias como el ginseng o el guaraná, hidratos de carbono como la glucuronolactona, vitaminas, etc.
Peligros para la salud de las bebidas energéticas
El consumo de 1,4 mg de cafeína por kilogramo de peso corporal por día puede provocar insomnio y acortar la duración del sueño.
Los riesgos cardiovasculares y hematológicos, neurológicos y psicoconductuales están asociados con ingestas superiores a 3 mg. También debemos tener en cuenta las posibles interacciones con medicamentos y la presencia de otros ingredientes con principios activos “naturales” como el ginseng.
Otro de los problemas relacionados al consumo de estas bebidas, es su mezcla con bebidas alcohólicas. El efecto de esta combinación está relacionado con un aumento de la presión arterial, insomnio, taquicardia, etc.

Riesgos e ingestas de la cafeína
Debemos tener en cuenta que el envase más común de este producto contiene 32 mg de cafeína por cada 100 ml. El comité científico de la AESAN destaca estos riesgos para la salud asociados a la presentación en envases de 300 a 500 ml:
- Las personas que pesen 50 kg (o menos) deben evitar las bebidas energéticas que superen los 32 mg/100 ml, ya que pueden causar insomnio.
- Debido a los trastornos del sueño y los efectos adversos generales para la salud, una persona de 60 kg no debe consumir 1000 ml de ninguna bebida energética ni más de 500 ml de una bebida energética con una concentración de entre 40 y 55 mg de cafeína/100 ml.
- Los consumidores que pesan hasta 70 kg no deben consumir más de 1000 ml de estas bebidas de cafeína de 15 mg por día o 500 ml de cafeína de 32 mg para evitar trastornos del sueño.
Recomendaciones
- Desaconsejamos su consumo excesivo o abusivo, dado a sus posibles riesgos.
- No recomendado para niños, mujeres embarazadas o lactantes, personas sensibles a la cafeína, personas con trastornos cardiovasculares o neurológicos, personas con presión arterial alta y personas con trastornos de ansiedad.
- Ten en cuenta cualquier enfermedad o padecimiento que puedas tener, y tu incompatibilidad con el consumo de estas bebidas.
- Evita mezclar este tipo de bebidas con alcohol.
- Antes de tomar una de estas bebidas, lee atentamente los ingredientes. Así sabrás si tienes alergia o intolerancia a algún ingrediente.
- No consumir bebidas energéticas para compensar las pérdidas después de hacer ejercicio.
- Recuerda que las bebidas energéticas no sustituyen los elementos de una dieta equilibrada.